Otro 8 ½ vinculado a la 18 edición del Festival de Sevilla. Y le que teníamos ganas, porque Chema García Ibarra se ha convertido en una de las voces más singulares del cine español, gracias a su peculiar mezcla entre ciencia ficción y costumbrismo. Siempre ha dirigido, escrito y producido sus cortometrajes como El ataque de los robots de Nebulosa-5”, “Protopartículas” ,”Misterio, “Uranes”, “La disco resplandece” y “Leyenda dorada”, codirigida junto a Ion de Sosa. Estos proyectos fueron seleccionados y premiados en prestigiosos festivales como Cannes, Róterdam, Sundance, Berlín, Valdivia o BAFICI.

Al director le interesan “cuatro cosas en un universo limitado pero nunca he sentido la necesidad de salir de allí”. Por eso se mueve entre opuestos, la risa rodeada de oscuridad y el drama en la comedia, “tanto como espectador como cineasta me gusta la incomodidad, el asombro y sentir la presencia de lo inesperado”. Opuestos que incorpora en su salto al largometraje “Espíritu sagrado”, premiada en Locarno e incluida en la Sección Oficial de Sevilla. Una propuesta que mezcla costumbrismo local con toques de cinéma-verité y ciencia ficción low-fi , aderezado con un sentido singular del humor surrealista. En el arranque de la película se confirma que media España sale en busca de una niña desaparecida, mientras que una asociación de ufología valenciana tiene una sesión de avistamientos nocturnos. Entre eññps está José Manuel, que conoce un secreto que podría alterar el futuro de la humanidad.

Elche es la ciudad en la que vive y vuelve a ser el escenario donde se desarrolla “Espíritu Sagrado”, un retrato único de la España de barrio, alejado de las calles de Malasaña en las que se refugia mucho cine nacional. Ibarra reivindica la necesidad de rodar fuera de las grandes ciudades, porque “hay que empezar a decir que la periferia es Madrid o Barcelona, por eso me gustar colar los acentos, la ropa, las comidas propias o la música que se escucha».

Determinantes son sus actores y actrices, no profesionales, porque determinan el proceso de guión. No le gustan las actuaciones convencionales porque todas las voces le suenan igual, por eso hace películas “con personajes que hablan poco, apenas se mueven y no expresan emociones físicas, nunca he escrito una escena en el que alguien llora o tiene un ataque de rabia”.

Otra de las cosas que distingue a sus películas es la dirección artística, que vuelve a ser responsabilidad de Leonor Díaz. “Ella llega al sumun de la dirección artística, hay cosas que se plantearon  con tres años de antelación,  cada plano es como un museo».

Usa la música de manera irónica, porque los seguidores de la ufología tienen contacto con esa mezcla de new age o chill out, caracterizada por producciones muy malas, pero que arrasaron en ventas en los primeros noventa. Un ejemplo fue el grupo “Sacred Spirit” con su mezcla de electrónica y voces de indios norteamericanos, que termina dando título a la propia película.

Escuchen los comentarios de Chema García Ibarra y acudan al estreno en salas de cine de su propuesta, una mezcla de costumbrismo local, toques de cinéma-verité y ciencia ficción low-fi, aderezado con un sentido singular del humor surrealista.

Escuchar la charla entre Chema García Ibarra y José Antonio Vega en Mixcloud

Jose Antonio Vega es colaborador de laEscena
@joseanvega64