Es probable que leer «Un día perfecto para el pez plátano» sin conocer a Seymour Glass, pues Seymour es un viejo conocido de Salinger y de sus lectores, provoque un gesto de extrañeza, una incredulidad ante una narración en la que, aparentemente, pasan muy pocas cosas como para comprender el gesto final de Seymour. Pero Salinger, lo que de verdad no comprende, es que todos los actos deban ser comprensibles y hasta lógicos. Por mi parte, tampoco sé si todos los actos han de serlo, lo que sí sé es que en Seymour ningún acto es gratuito. Supuestamente de luna de miel con su esposa; supuestamente víctima de desajustes mentales; supuestamente un tipo inadaptado y caprichoso; supuestamente un lobo solitario, un heterodoxo con especial química para los niños.
Salinger no es un provocador por narrar de manera tan natural algo excepcional (o sí). La narrativa de corte clásico no admitía grandes sucesos sin inventariar sus causas y efectos. Salinger se aparta del discurso clásico y al no manejar a sus personajes, éstos logran dar una sensación veraz de autonomía pues el narrador, en este caso, es apenas un accidente necesario.
Supuestamente, un excombatiente.
La vida pasa con toda normalidad por Nueva York, Miami o por delante de tu casa; y en un instante de ese pasar va un muchacho y se pega un tiro en la sien derecha:
recién casado
inadaptado
inestable
excombatiente
que diría una suegra desconfiada.
Pero el relato no es un relato trágico, ni siquiera triste. Lo importante es que Seymour le descubre a Sybil un secreto de la naturaleza: el prodigioso pez plátano. Era un día perfecto para verlo y la niña lo consiguió.
Cualquier día es un día perfecto
para las suegras
para pintarse las uñas
para hacer un gran descubrimiento
para olvidar la guerra
para recordarla
para tocar el piano
para que una niña se enamore
para no calcular los pros ni los contras
para comer aceitunas
para comer cera en pinturas
en velas
para contar una historia cualquiera en cuyo fondo hay un pozo del que no es posible salir.
«Nueve cuentos». J.D.Salinger. Alianza editorial
Fernando Menéndez es escritor
@Fercantona