Una vez más y ya pasan de la decena Francisco Nixon aprovechaba sus vacaciones navideñas para ofrecernos un concierto en el Patio de la Favorita de Gijón. No cabe decir si éste fue mejor o peor que los anteriores y sí podemos apuntar que siempre estas actuaciones son bien distintas porque el repertorio siempre lo es.
La actuación fue a las 20 PM, una hora poco convencional pero necesaria por aquello de la conciliación familiar del artista, y al ser un evento gratuito había dos tipos de público: el que se colocó al fondo del local y el que pasaba por allí.
Fran Fernández nos lleva cautivando como gran hacedor de canciones pop desde hace más de un cuarto de siglo y esta tarde el repertorio lo escoró hacia La Costa Brava, el grupo que compartió con Sergio Algora, de cuya desaparición se han cumplido diez años.
Que hay relevo generacional en el pop español es más que evidente y en este concierto de Francisco Nixon lo comprobamos de primera mano. A un metro de mí estaba un niño de unos 10 años con sus padres que se sabía todas las canciones, que cantaba con sus progenitores. Curioso pero cierto.
El gijonés recuperó temas conocidos de La Costa Brava como esos éxitos por los que no han pasado los años como «Natalia Verbeke», «Déjese querer por una loca, «Adoro a las pijas de mi ciudad», «El cumpleaños de Ronaldo» o «33», con la que cerró el concierto, regalando por sorpresa una rareza firmada por Sergio Algora: «Mi última mujer».
No picó en el cancionero de Australian Blonde pero sí eligió una selección exquisita del material de Francisco Nixon: «Siempre es el cumpleaños de alguien», «Médico rural», «Inditex», «Brackets» y «Erasmus borrachas».
Y sí, hubo un sorpresón, hizo un tema que nunca toca como bien dijo. Se trató de «Juventud», versión de Terry Winter vía los chilenos Tiza, que él hizo junto a Linda Mirada en el álbum Lo malo que nos pasa.
No hubo tiempo para más, ni siquiera para un bis que hubiéramos agradecido los incondicionales. Menos de cuarenta y cinco minutos y el público estaba entregado. Francisco Nixon nos dejó con ganas de más, pero espero que le podamos ver muy pronto de nuevo porque es hoy por hoy uno de los mejores hacedores de pop que hay este país.
El único ¡ay! de la velada, aunque plenamente entendible, fue que ésta apenas si duró cuarenta minutos, lo justo para quedar con ganas de más. El propio Fran se despidió al final con un hasta el año que viene; esperamos encontrárnoslo en el camino mucho antes porque es uno de los más grandes artistas del pop en castellano.
Francisco Nixon
El Patio de la Favorita (Gijón)
25 de diciembre
Víctor R. Villar es periodista
@VictorRVillar