El «Minus 16», coreografía del israelí Ohad Naharin, abre el Festival de Danza de Oviedo de la mano del Silicon Valley Ballet, que dirige José Manuel Carreño (siempre una referencia). Hay que verlo y analizarlo y, luego, si se tercia, opinar. Las representaciones de esta obra a cargo de otras compañías como la Batcheva Dance Company, la catalana It Dansa o la propia Compañía Nacional de Danza (CND), entre otras, han puesto el listón bastante alto. Aparentemente, es una coreografía que parece fácil. En absoluto. Hay que resolverla en todas sus facetas y trasladarla bien. Y, sobre todo, dar esa sensación de continuidad y armonía que tanto requieren algunas cosas que pueden parecer a priori inconexas: antagonismo musical y gestual. Etnia cantada y urbanidad.

Ohad Naharin es un prestigioso creador israelí cuyo nombre ya se conoce bien en Europa y Estados Unidos; es, además, el inventor del movimiento Gaga, una forma de trabajo corporal muy concreta, dentro del amplio espectro de la disciplina física en la que se basa la danza contemporánea. Es una oportunidad para ver estos propósitos.

No obstante, el Silicon Valley Ballet viene con un programa mixto, muy mixto, de estilos polarizados. Traen la coreografía «Glow Stop», con música de Philip Glass, un señor que en ocasiones da un poco de grima; entendamos: musicalmente hablando. También se pondrá en escena el paso a dos de «El Corsario» y «Prims», de López Ochoa. A ver.

Silicon Valley Ballet
El Corsario (Paso a dos. J.M. Carreño. M. Petipa)
Glow Stop. J. Elo
Prism. A. López Ochoa
Minus 16. Ohad Naharin
Teatro Campoamor, Oviedo
Sábado 13 de febrero, 20:00 horas

Yolanda Vázquez es periodista especializada en danza
@yolazmartin