Por las alturas y volando. Así ha comenzado la 25 edición de Feria Internacional de Teatro para Niños, FETEN, que ha convertido las calles de Gijón en un gran escenario al aire libre. Cientos de personas, muchas de ellas niños, se han acercado a las distintas plazas de la ciudad para contemplar con deleite una troupe de acróbatas, malabaristas, bailarines, zancudos o monstruos gigantes empeñados en conquistar el cielo. La música, el colorido, la palabra y la danza han rendido un homenaje a la fantasía convirtiendo la ciudad en una gran fiesta. Paralelamente, la compañía Aracaladanza abría oficialmente la Feria en el Teatro Jovellanos con un espectáculo hipnótico basado en los ingenios voladores de Leonardo da Vinci. Una propuesta sorprendente que utilizando como base el lenguaje de la danza genera una narrativa visual de gran belleza y perfección técnica. Tanto niños como mayores volaron emocionados sobre el juego esteticista que articula este espectáculo, recién estrenado, y que es muy recomendable para disfrutarlo en familia. Por si esto fuera poco, el final de la tarde nos deparaba una de esas sorpresas que suelen aparecer de vez en cuando en este tipo de eventos.
Casi de modo clandestino, en la sala de ensayos del Centro Cultural Antiguo Instituto Jovellanos, un puñado de espectadores contemplaban atónitos como Anne Sagüés y Jon Muñoz, dos jóvenes de catorce y dieciocho años, deambulaban por encima de una alcantarilla imaginaria para contarnos cómo se vive en un territorio en guerra. Espectáculo maravilloso por su humildad y franqueza, donde sus protagonistas han pasado de jugar a hacer teatro a hacer teatro jugando.
El telón de esta 25 edición se ha abierto de forma brillante. Queda toda una semana para disfrutar de un montón de propuestas y lo más importante contemplar el mundo con la mirada más limpia, las que nos regala la fantasía.
Juan Mortera es director teatral
juanmortera@hotmail.com